En 1979 China declaró al Baiji en peligro, y en 1983 se decreto que su caza era ilegal. Para 1986 la población total se estimaba es unos 300 individuos, y en 1990 unos 200. Su número siguió decreciendo rápidamente, sobre todo con la construcción de la Represa de las tres Gargantas, que alteró de manera irrecuperable el hábitat de este delfín. En 1998 solo se pudieron encontrar 7 ejemplares, y los científicos especularon con poder salvarlos moviéndolos a un lago cercano para luego llevarlos nuevamente al río cuando sus chances de sobrevivencia fuesen mayores. Pero una expedición que recorrió el río de extremo a extremo en 2006 no pudo hallar ni uno de estos delfines, por lo que se lo declaró oficialmente extinto..
“La extinción de los baiji también destaca la necesidad de nuevas iniciativas de la conservación en el ecosistema cada vez más amenazado de Yangtze de China, que es también casero a las masopas de agua dulce puestas en peligro, a los pescados largos de siete metros, a los salamanders gigantes y a las grúas siberianas blancas,” el Dr. concluido Turvey (información recopilada del internet)
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