El águila arpía
Es un ave que vive en la zona neotropical. Es el águila más grande del Hemisferio Occidental y del Hemisferio Austral y la única del género Harpia. Su hábitat es el bosque lluvioso.
Es una especie considerada vulnerable a la extinción, necesita del bosque para sobrevivir, lo cual la hace vulnerable a la destrucción por deforestación de los bosques y fragmentación de su hábitat, causas que son alarmantes en algunas zonas de sudamerica. En algunos casos, esta ave es objeto de cacería indiscriminada e injustificada por parte de cazadores inescrupulosos, bien sea por temor, o para utilizar su cuerpo o sus garras como trofeos. Algunos pueblos indígenas de latinoamérica llegan a utilizar esta especie como mascota-talismán y para la elaboración de artesanías. Sus garras son tres veces más poderosas que las mandíbulas de un perro y puede despedazar un brazo humano de un sólo movimiento, pero el águila arpía es débil para sobrevivir a la deforestación, lo que la convierte en una de las aves más amenazadas en América latina.
Protegiendo los bosques tropicales del Estado Bolívar garantizaremos la supervivencia del águila arpía y de muchas otras únicas en el mundo, pues estos ecosistemas ofrecen las condiciones más adecuadas para su desarrollo y reproducción. Además de la biodiversidad que en ellos se encuentra, estos bosques poseen una gran riqueza mineral en sus suelos, su vegetación produce grandes cantidades de oxígeno para el planeta y en ellos se encuentran algunas de las cuencas hidrográficas más importantes de nuestro continente.
Es un ave que vive en la zona neotropical. Es el águila más grande del Hemisferio Occidental y del Hemisferio Austral y la única del género Harpia. Su hábitat es el bosque lluvioso.
Es una especie considerada vulnerable a la extinción, necesita del bosque para sobrevivir, lo cual la hace vulnerable a la destrucción por deforestación de los bosques y fragmentación de su hábitat, causas que son alarmantes en algunas zonas de sudamerica. En algunos casos, esta ave es objeto de cacería indiscriminada e injustificada por parte de cazadores inescrupulosos, bien sea por temor, o para utilizar su cuerpo o sus garras como trofeos. Algunos pueblos indígenas de latinoamérica llegan a utilizar esta especie como mascota-talismán y para la elaboración de artesanías. Sus garras son tres veces más poderosas que las mandíbulas de un perro y puede despedazar un brazo humano de un sólo movimiento, pero el águila arpía es débil para sobrevivir a la deforestación, lo que la convierte en una de las aves más amenazadas en América latina.
Protegiendo los bosques tropicales del Estado Bolívar garantizaremos la supervivencia del águila arpía y de muchas otras únicas en el mundo, pues estos ecosistemas ofrecen las condiciones más adecuadas para su desarrollo y reproducción. Además de la biodiversidad que en ellos se encuentra, estos bosques poseen una gran riqueza mineral en sus suelos, su vegetación produce grandes cantidades de oxígeno para el planeta y en ellos se encuentran algunas de las cuencas hidrográficas más importantes de nuestro continente.
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